Neuropricing: cómo aumentar tus ventas sin bajar precios

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26 de mayo | Por Juan Merodio

Durante años pensé que si quería vender más tenía que rebajar precios. Hacer descuentos. Añadir regalos. En definitiva, sacrificar margen como si fuera el único camino hacia el éxito.

Pero estaba equivocado.

Un día entendí algo que transformó por completo mi forma de ver los precios: el precio no es solo un número, es una herramienta de persuasión. Y no, no estoy hablando de ponerlo más barato. Estoy hablando de aplicar estrategias basadas en Neuropricing, una metodología que combina psicología y marketing para influir en las decisiones de compra.

 

Sí, suena a término de gurú, pero es una técnica con base científica. Y sobre todo, con resultados. Con ella, logré aumentar mis conversiones y vender productos más caros sin tocar el contenido ni invertir más en publicidad.

 

Lo primero que probé: El famoso efecto del 9

Seguro lo has visto mil veces: precios que acaban en 9, como 9,99€ en lugar de 10€. Yo también los vi, pero los ignoré… hasta que decidí testearlo en serio.

¿Resultado? Aumento de ventas.
Mismo tráfico, mismo producto. Solo cambié el precio a 97€ en vez de 100€.

Sé lo que estás pensando:
“Vamos, por 3 euros nadie cambia su decisión”.
Pero lo cierto es que no somos tan racionales como creemos. Y el mercado lo sabe.

No se trata de magia. Se trata del cerebro reptiliano, esa parte primitiva que toma decisiones de forma rápida y automática. Y cuando ve un precio como 97€, lo percibe como significativamente menor que 100€, aunque objetivamente no lo sea.

 

Otras técnicas que dispararon mis ventas

Una vez validé que el Neuropricing funcionaba en mis estrategias de marketing digital, profundicé en otras técnicas que me permitieron escalar sin cambiar el producto ni gastar más en tráfico:

 

Anclaje de precio

Si vas a vender algo por 99€, primero muestra una opción “premium” de 299€. Aunque no vendas esa versión, el precio alto sirve para que los 99€ parezcan una ganga. El cliente siente que está ahorrando.

💡 Ejemplo real: Apple lo hace al presentar sus nuevos iPhone. Siempre hay una versión Pro Max con un precio elevado, que sirve de anclaje para que la versión intermedia parezca más razonable.

 

Cebo estratégico (decoy)

Ofrece tres opciones: una básica, una intermedia (la que realmente quieres vender) y una excesivamente cara. El cliente, buscando equilibrio, suele elegir la del medio.

💡 Ejemplo real: Adobe Creative Cloud ofrece planes para estudiantes, individuos y empresas. ¿Adivinas cuál es el más contratado? El del medio.

 

Precios “feos” que venden bonito

En lugar de redondear a 100€, usa 97€ o 93€. Es solo una diferencia simbólica, pero activa la percepción de estar aprovechando una oferta.

💡 Ejemplo real: Zara y muchas tiendas de retail utilizan precios como 29,95€ o 49,99€ para crear sensación de oportunidad.

 

El error común: competir bajando precios

Muchos negocios entran en una guerra de precios pensando que es la única manera de ganar clientes. Pero eso es jugar en el terreno de la rentabilidad cero.

 

La clave no está en bajar precios, sino en elevar tu estrategia de pricing.

Si sabes cómo presentar tus precios, puedes vender más, con mejor margen, y sin desgastarte en promociones constantes.

 

Plan de acción: Cómo aplicar el Neuropricing en 5 pasos

1. Elige un producto estrella. No lo cambies. Solo céntrate en optimizar su precio.
2. Aplica el efecto 9 o 7. Cambia precios como 100€ a 97€ o 99€.
3. Crea una oferta con tres niveles. Usa el “cebo” para destacar la opción que más te interesa vender.
4. Utiliza el anclaje. Muestra primero una opción más cara que sirva como referencia.
5. Mide los resultados. Haz pruebas A/B, compara semanas y toma decisiones con base en datos, no suposiciones.

 

Ejemplos de empresas que aplican Neuropricing con éxito:

• Netflix: ofrece tres planes, y el más contratado suele ser el intermedio, gracias al efecto cebo.
• Apple: siempre muestra la versión más cara de sus productos para anclar el precio.
• McDonald’s: sus menús “medianos” se ven más razonables frente a las opciones “extra”.
• Booking.com: utiliza precios tachados y ofertas temporales para crear sensación de oportunidad.

 

Preguntas frecuentes

1. ¿El Neuropricing funciona para productos B2B?
   Sí. Aunque los procesos de decisión sean más largos, las percepciones siguen influyendo. El anclaje y la estructura de precios pueden aumentar la conversión incluso en propuestas comerciales.
2. ¿No es manipulación psicológica?
   Es persuasión. Y si se hace con ética, no solo vendes más, sino que ayudas al cliente a tomar una mejor decisión.
3. ¿Esto aplica también en servicios?
   Totalmente. Asesores, consultores, formadores… todos pueden beneficiarse del Neuropricing.
4. ¿Debo cambiar todos mis precios?
   No. Empieza con un producto o servicio, mide el impacto y decide si escalarlo.
5. ¿Es efectivo incluso en productos de bajo coste?
   Sí. Cuanto más ajustado sea el precio, más influye la percepción.

 

Mientras muchos negocios compiten por quién baja más sus precios, tú puedes empezar a jugar a otro nivel.
Porque vender más no va de bajar precios, va de entender mejor cómo decide tu cliente.

¿Listo para probarlo en tu negocio?

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