Herramientas de marketing para el negocio
13 de febrero 2025
28 de noviembre | Por Juan Merodio
En los últimos años, he acompañado a decenas de empresas en procesos de transformación digital donde la inteligencia artificial (IA) juega un papel protagonista. Y siempre observo la misma preocupación: “Juan, ¿cómo incorporamos IA en recursos humanos sin deshumanizar la empresa?”
La respuesta es clara: la IA no sustituye personas; amplifica su capacidad. Pero para lograrlo hay que entender algo fundamental: la gestión de personas no puede ser 100% automatizada. Necesita supervisión humana en cada fase.
La IA aporta velocidad, precisión y capacidad de anticipación. Las personas aportan empatía, criterio y contexto. Cuando ambos conviven en un modelo híbrido —lo que llamamos human in the loop— las empresas ganan en eficacia sin perder esencia.
Este enfoque ya está transformando la forma en la que las compañías seleccionan talento, gestionan nóminas, evalúan desempeño o acompañan a sus equipos en su desarrollo profesional. Y está al alcance tanto de grandes corporaciones como de pymes.
Joaquín Castiella, director de Lexa Go, resume una idea clave que comparto plenamente:
“El complemento del ser humano no es que sea necesario, es que es esencial.”
Su plataforma combina IA generativa con revisión de expertos jurídicos para resolver consultas laborales. Procesan más de 1.500 consultas semanales con una mínima tasa de error porque, cuando el sistema detecta incertidumbre, la respuesta pasa por un abogado laboralista.
Este es el modelo correcto:
IA para acelerar. Personas para validar. Empresa para escalar.
Sucede lo mismo en soluciones de gestión empresarial como Sage HR, que automatiza procesos administrativos, cálculo de nóminas o informes, pero deja la decisión final en manos del equipo de RR.HH. o del CFO.
La clave no está en sustituir funciones, sino en eliminar cargas administrativas para que los equipos se centren en lo que realmente añade valor: las personas.
Una transformación digital inteligente no implica deshumanizar la empresa. Implica liberar tiempo para conversaciones, acompañamiento, liderazgo y cultura.
Aquí tienes un mapa claro:
| Área de RR.HH. | Tareas automatizables con IA | Requieren toque humano |
| Selección | Cribado de CV, análisis de competencias, pruebas psicométricas | Entrevista final, decisión de contratación |
| Onboarding | Envío de documentación, seguimiento de tareas, chatbots de bienvenida | Transmisión de cultura, acompañamiento inicial |
| Formación | Detección de necesidades, recomendación de cursos personalizados | Mentoría, feedback, evaluación humana |
| Nómina y administración | Cálculo, reporting, gestión de incidencias | Comunicación de incidencias sensibles |
| Desempeño y feedback | Análisis de datos, indicadores predictivos | Conversaciones de desarrollo, feedback emocional |
Como afirmó María Beunza:
“La IA actúa como un copiloto, no como sustituto. Completa al profesional y potencia el autoconocimiento.”
Y esto solo funciona cuando va acompañado de liderazgo empático, cultura inclusiva y reconocimiento humano.
Estos ejemplos demuestran cómo las compañías pueden integrar IA en sus operaciones de RR.HH. sin perder el factor humano.
Human AI, liderada por María Beunza, utiliza modelos de procesamiento de lenguaje natural (NLP) para analizar textos escritos por candidatos y empleados. A partir de esos textos, el sistema es capaz de construir un perfil detallado de:
Esto permite crear planes de desarrollo profesional personalizados con una base científica, algo que, tradicionalmente, requería semanas de análisis manual.
María lo resume así:
“A partir de un texto, podemos obtener toda la personalidad y las competencias socioemocionales.”
Esta herramienta se ha aplicado en:
Un ejemplo práctico: una universidad española detectó precozmente casos de burnout entre estudiantes gracias a patrones lingüísticos identificados por IA.
La IA también está revolucionando el ámbito jurídico-laboral.
Lexa Go es la primera IA laboralista de España capaz de responder consultas legales con alto nivel de precisión y seguridad jurídica. Su modelo combina:
Joaquín Castiella lo explica así:
“Lo que aportamos diferente en el sector es ese nivel de precisión y seguridad jurídica con una base de datos cerrada que es tuya y es controlada.”
Esta plataforma gestiona más de 1.500 consultas laborales cada semana. No sustituye al abogado; multiplica su capacidad.
Securex Tech lleva desde 2018 ayudando a pequeñas y medianas empresas a robotizar procesos administrativos de RR.HH. mediante IA y automatización.
Más de 120 procedimientos ya han sido robotizados:
Su directora, Maica Enrique, resume perfectamente el enfoque:
“El valor de la persona radica en cómo utiliza la IA. Con tu conocimiento y el de la IA, el impacto es exponencial.”
Además, ofrecen formación en:
Es la combinación perfecta entre tecnología y acompañamiento humano.
Para que puedas visualizar mejor la aplicación práctica, te comparto casos reales de compañías internacionales:
Utiliza IA para el primer filtrado de candidatos, analizando expresiones faciales, tono de voz y lenguaje utilizado.
Resultado: reducción del 70% en el tiempo del proceso de selección.
Su plataforma Watson analiza perfiles internos para recomendar promociones, formación y movilidad interna.
Resultado: mejora del 20% en retención de talento.
Usa IA para optimizar turnos, prever cargas de trabajo y evitar sobrecargas en determinados equipos.
Resultado: mejora en la planificación de personal y reducción de rotación en áreas críticas.
Aplica IA para detectar patrones de desmotivación o riesgo de abandono a través del análisis de datos internos.
Resultado: capacidad predictiva para intervenir antes de que un empleado decida marcharse.
Si eres responsable de RR.HH., CEO o CFO en una pyme, este es el camino que recomiendo seguir. Lo aplico en consultorías de transformación digital en empresas de España, LATAM y EE.UU.:
Haz un inventario de procesos:
Normalmente aparecen tareas como nóminas, reporting, incidencias, gestión documental o cribado de candidatos.
Empieza por herramientas que no requieran una gran inversión inicial ni un despliegue técnico complejo.
Ejemplos:
La IA no falla; fallamos nosotros cuando no sabemos interpretarla o validarla.
Por eso tu equipo debe aprender:
No es suficiente “tener IA”. Debes medir impacto real:
No empieces por lo más complejo. Hazlo así:
Preguntas frecuentes (FAQs)
No. La IA puede cribar, recomendar y analizar, pero la decisión final debe ser humana para evitar sesgos y garantizar un encaje cultural adecuado.
No. Hoy existen soluciones accesibles y económicas diseñadas específicamente para pymes.
Sesgos, interpretaciones erróneas y uso inadecuado de datos. Se mitigan con supervisión humana y algoritmos éticos.
Puede aportar datos más objetivos, pero necesita complementarse con feedback humano para interpretar contexto y emociones.
Con transparencia, formación y una comunicación clara: la IA no reemplaza; ayuda.
Juan Merodio
Juan Merodio es conferenciante y divulgador de IA y Marketing Digital. Emprendedor en serie que nunca se bajó del tren de la innovación. Fundó su primera empresa en el 2004 y desde entonces no ha dejado de crear, transformar y liderar proyectos que han impactado sectores tan diversos como la tecnología, la educación, el real estate o la inteligencia artificial. De startups digitales a compañías multimillonarias, pasando por TEKDI, su instituto online que ya ha formado a miles de personas en IA y marketing digital, Juan combina visión estratégica, pasión por enseñar y una obsesión sana por ayudar a otros a crecer. Con presencia en mercados como España, Estados Unidos, Japón o Latinoamérica, más de 1.000 conferencias impartidas y 16 libros publicados, es un divulgador nato. Pero si algo lo define no es su currículum, sino su capacidad para ver lo que viene… y construirlo antes que nadie.
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