Cómo escribir emails que generan acción

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22 de mayo | Por Juan Merodio

Durante un tiempo, pensé que el email marketing era cosa del pasado. Que fue una moda de 2008. Que ya nadie abría un correo si no era para ver una factura o hacer clic en «desuscribirme». Hasta que entendí algo incómodo, pero esencial:

El problema no era el canal. Era mi estrategia.

 

Y si estás sintiendo lo mismo —que tus campañas no funcionan, que nadie responde, que tu tasa de apertura es una ruina— sigue leyendo. Porque esto no va de esperar milagros desde Gmail, sino de entender que en el marketing digital actual o captas atención, o desapareces. No hay término medio.

 

El Momento Incómodo Que Me Hizo Cambiarlo Todo

Enviaba correos constantemente. Con diseños atractivos, emojis, gifs, “trucos” de copy y todo lo que se supone que funcionaba. ¿El resultado? Cero impacto. Desuscripciones. Y lo peor: indiferencia.

Y ahí llegó mi “momento espejo”. Porque en lugar de culpar al canal, decidí culparme a mí mismo.

Analicé, revisé, ajusté. Y me di cuenta de algo: el email marketing sigue vivo… pero solo si lo usas bien.

 

¿Por Qué Tus Correos Acaban En El Limbo?

Un profesional recibe más de 120 correos al día. Entre notificaciones de redes sociales, informes internos, promociones y recordatorios, tu mensaje compite en una jungla de ruido. Y si tu asunto no llama la atención, si el cuerpo del correo es genérico o tibio, no tienes ninguna oportunidad.

👉 No es que la gente no lea emails. Es que no quiere leer más de lo mismo.

 

¿Quieres Que Te Lean? Deja De Escribir Como Todos

Mi punto de inflexión llegó cuando abandoné la idea de “caer bien” a todos. Empecé a escribir como hablo. Directo. Humano. Con intención. Con titulares que dividen, que hacen que algunos me amen… y otros me bloqueen. ¿Y sabes qué? Eso es perfecto.

 

Aquí tienes algunos ejemplos reales de asuntos que usé y que dispararon mis métricas:

• “Este error te está costando ventas (y ni lo sabes)”
• “Si tu negocio está estancado, este es el motivo”
• “No es tu competencia. Eres tú. Y este email lo prueba.”

Sí, son duros. Pero captan atención y provocan acción, que es de lo que va esto.

 

El Cuerpo Del Email: Donde Se Ganan (O Pierden) Conversiones

Otro error clásico: escribir demasiado. Creer que más texto implica más valor. Falso.

Hoy mis emails son simples, breves y enfocados:

• Una idea central.
• Un mensaje claro.
• Una llamada a la acción sin rodeos.

Nada de “por si te interesa…”. Si quiero que se registren, lo digo. Si quiero una reunión, la pido. Sin pedir perdón por vender.

 

El CTA: Tu Cierre De Ventas No Puede Ser Tímido

¿Te cuesta cerrar ventas por email? Revisa tu llamada a la acción. Seguramente es ambigua o suena a excusa.

Lo cambié por frases como:

• “Haz clic aquí si vas en serio.”
• “Agenda tu llamada. Ahora. No mañana.”
• “¿Te interesa o no? Sé directo.”

¿Polémicas? Tal vez. ¿Efectivas? Siempre.

 

No Es El Email. Es Tu Forma De Usarlo

Aquí van las verdades que aprendí tras cientos de pruebas:

• Tu lista importa, pero el engagement importa más.
• Un diseño bonito no vende. Un mensaje claro, sí.
• No necesitas enviar más correos. Necesitas enviar mejores.

Y si esto te incomoda, enhorabuena. Estás a un paso de mejorar.

 

Plan de Acción Para Revivir Tu Estrategia de Email Marketing

Si quieres resultados reales, empieza por aplicar esto desde hoy:

1. Revisa tus últimos 3 correos. ¿Tú los abrirías?
2. Haz A/B Testing. Prueba un asunto racional vs. uno emocional.
3. Reescribe tu primer línea. Elimina frases vacías como “espero que estés bien”.
4. Incluye un CTA valiente. Si da miedo enviarlo, probablemente es el correcto.
5. Corta tu texto a la mitad. Deja solo lo esencial.

Ejemplos Reales de Empresas Que Lo Hacen Bien

• Morning Brew: Con asuntos provocadores y copy directo, mantienen tasas de apertura del 40% en un sector sobresaturado.
• Duolingo: Usa gamificación, lenguaje humano y llamadas a la acción claras para retener usuarios y aumentar engagement.
• Basecamp: Su estilo sobrio pero sincero convierte porque no intenta parecer otra cosa. Hablan claro, y eso vende.
• Hawkers: Apuesta por asuntos rompedores y mensajes breves que van directo al punto. Su CTR supera el 5% en campañas clave.

 

FAQs

1. ¿Cuál es la mejor hora para enviar un email?
   Depende de tu audiencia, pero entre semana, de 9 a 11 a. m., suele funcionar bien. Prueba y mide.
2. ¿Qué pasa si tengo una lista pequeña?
   Mejor. El engagement importa más que el tamaño. Cuida tu lista como oro.
3. ¿Diseño bonito o texto potente?
   El texto gana siempre. El diseño debe acompañar, no reemplazar el mensaje.
4. ¿Cada cuánto debo enviar emails?
   Tan seguido como tengas algo de valor que decir. La clave es la relevancia, no la frecuencia.
5. ¿Cuántas llamadas a la acción por email?
   Una. Máximo dos si son complementarias. Cuanto más claras, mejor.

 

Conclusión: El email marketing no está muerto. Lo que está muerto es el enfoque tibio, genérico y sin alma. Elige sobresalir. Elige comunicar con intención. Porque en un mundo saturado de información, solo los que se atreven a ser diferentes logran ser leídos.

¿Vas a seguir enviando correos que nadie lee o vas a reescribir tu estrategia desde hoy?

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